Sonreír al naufragio de tus manos, mientras me pierdo en lo más profundo de tus dulces bellos secretos.
Quiero mirar al horizonte triunfante mientras tu cuerpo cálido extasia de deleitad mi deseo lascivo
Ver como el amor entre los dos puede crecer con solo un momento dicha y fruición.
Romper el cristal, dejar la continencia atrás, entregarnos al anhelo de esta carne con vehemencia.
Ser tu cuerpo mío hasta que termine el amanecer.
Leticia Magaña Rios